El lanzador que fue alcanzado por un rayo y aún terminó el juego
El año era 1919 y un lanzador itinerante trabajaba hasta la novena entrada cuando de repente ocurrió "un espectáculo aterrador". Lo que sucedió después sigue siendo tema de conversación más de 100 años después.
Casi 20,000 hombres diferentes se han autodenominado jugadores de las Grandes Ligas de Béisbol desde el inicio de la liga, y la gran mayoría ha sido completamente olvidada en la inmensidad de la historia del deporte.
La carrera de Ray Caldwell se dirigía en esa dirección. A pesar de tener una página llena de anécdotas únicas, el abuso de alcohol y problemas fuera del campo estaban llevando su carrera hacia la oscuridad.
"No creo que un tipo como Ray Caldwell pueda existir actualmente en las Grandes Ligas de Béisbol", dijo Randy Anderson, presidente del Salón de la Fama del Deporte de Chautauqua, a AccuWeather. "Es un auténtico representante de una época muy diferente".
Ray Caldwell es un nombre que podría ganarte unos cuantos dólares en una noche de trivia. Fue el pitcher abridor que inició los juegos en las grandes inauguraciones del Fenway Park y el Ebbetts Field, lanzó el juego 91 sin hits en la historia del béisbol, fue uno de los últimos 17 lanzadores autorizados legalmente para lanzar una bola escupidora, e incluso compartió habitación con Babe Ruth cuando jugaba en Boston.
Campeones de la Liga Americana, el Presidente James C. Dunn, en el centro, y su equipo ganador de la banderola, los Cleveland Indians. El mánager Tris Speaker está sentado a la derecha de Dunn, el 30 de septiembre del 1920. (Foto de AP)
Pero a pesar de esos datos curiosos, ninguno fue lo suficientemente destacado como para inmortalizar su carrera.
Sin embargo, hubo un día, en agosto de 1919, que hizo que la carrera de Caldwell fuera memorable para siempre. En un abrir y cerrar de ojos, de la nada, un rayo golpeó a Ray Caldwell mientras estaba en el montículo, en medio del juego.
De alguna manera, se levantó rápidamente y terminó el juego.
En la parte baja de la novena entrada
"Sucedió que era el primer inicio de Caldwell con el club. Era un duelo de lanzadores contra los Athletics de Connie Mack", dijo Jeremy Feador a AccuWeather. "Llegaron a la novena entrada, con dos outs, el bateador al plato y de repente, se escuchó un fuerte estruendo de trueno y un rayo cayó detrás del montículo del lanzador".
Feador ocupa el papel único de historiador para la organización de los Cleveland Guardians, una posición que le encanta debido a historias como la de Caldwell.
La increíble distinción de ese juego de mitad de temporada no terminó con el impacto del rayo, sino con lo que Caldwell hizo a continuación.
Después de retirar a los dos primeros bateadores de la novena entrada, Caldwell solo necesitaba un out más para terminar el juego. El campocorto de los Athletics, Joe Dugan, se acercó al plato.
"¡Boom!", dice el relato histórico de SABR.org. "Un juego que había tenido poca acción, y aún menos drama, de repente se convirtió en un espectáculo aterrador".
El rayo impactó el League Park, el estadio local de Cleveland, mientras las oscuras nubes se alejaban del Lago Erie. En todo el estadio, los fanáticos salieron corriendo debido al rayo, que Anderson sospecha que pudo haber lesionado a algunos espectadores debido a las barandas metálicas.
"Imagínate lo caótica que debió ser esa escena, especialmente con los fanáticos en el estadio. En el periódico mencionaron que sonaba como el estruendoso escape de mil coches", dijo Feador. "Si pudieras ser una mosca en la pared para presenciar un juego, definitivamente sería uno así."
En el campo de juego, Caldwell quedó tendido.
Durante cinco minutos, yacía inconsciente boca arriba mientras sus compañeros temían que estuviera muerto.
Informes de ese día afirman que el rayo alcanzó a Caldwell a través del botón de metal de su gorra y salió a través de los tacos de metal de sus zapatos. Los compañeros de equipo que estaban cerca también fueron alcanzados. El receptor Steve O'Neill arrojó su máscara chamuscada, mientras que el campocorto Ray Chapman casi se caía debido a la sensación entumecida en sus piernas.
Chapman, como los fanáticos del béisbol saben, es mucho más recordado por otro infame incidente en el campo de juego. Casi exactamente un año después del impacto del rayo, Chapman murió después de ser golpeado en la cabeza por una recta de Carl Mays, en una época anterior a los cascos de bateo.
"Quiero decir, ¿cuáles son las probabilidades de ser alcanzado por un rayo?", reflexionó Feador. "No soy un estadístico, pero sé que hay una alta probabilidad de que eso no le suceda a ninguno de nosotros, pero Chapman es alcanzado por un rayo y luego, un año después, es golpeado en la cabeza por una pelota y muere. Vaya persona tan desafortunada, en lo que respecta a estas situaciones tan poco probables salvaje y el hecho de que Chapman se vio afectado por ambas".
Para responder a la primera pregunta de Feador, las probabilidades son de una en 15,300.
Pero levantarse y terminar el juego de béisbol en el que estabas en medio de tal impacto, ¿cuáles son esas probabilidades? Son incomprensibles.
Después de recobrar la conciencia, Caldwell volvió al montículo y, aún en cierto estado de shock, continuó lanzando a Dugan, quien ciertamente no esperaba que su turno al bate continuara.
Caldwell siguió adelante de todas formas, y finalmente provocó un rodado para un out, "justo cuando las nubes se dispersaron y la lluvia cayó intensamente", informó The Plain Dealer, el principal periódico de Cleveland.
Pero a diferencia del mundo actual de noticias instantáneas que documenta la historia en las redes sociales, el proceso en 1919 no funcionó de la misma manera.
Mientras que la historia de Caldwell siendo alcanzado por un rayo sería un titular de primera plana un siglo después, Feador dijo que en ese momento, fue relegada a la sección de deportes de The Plain Dealer. Otros medios ni siquiera mencionaron la casi catástrofe en sus noticias.
"Piensa en lo que sucedería hoy en día, si se estuviera jugando un partido y un jugador fuera alcanzado por un rayo y quedara tirado en el suelo", dijo Anderson. "¿Alguien esperaría que el jugador se levante, se sacuda el polvo y continúe lanzando? Quiero decir, ¡habría un gran revuelo!"
Caldwell, el personaje
En muchos sentidos, la electrizante actuación de Caldwell ese día fue un microcosmos de su carrera. Un brillante lanzador, derribado por distracciones fuera del campo (o del cielo), que casi siempre cumplía con su trabajo, de una forma u otra.
Ese día, y en esa época, probablemente había poca duda sobre si Caldwell terminaría el juego o no.
"Definitivamente habla de la época en la que estaban jugando. Necesitabas terminar el juego si podías, si estabas consciente", dijo Feador. "Era un distintivo de honor tener el juego completo y no querías que otras personas terminaran el juego por ti".
Para Caldwell, los bateadores y el rayo podrían haber sido oponentes fáciles. Fueron los "demonios" antes y después de los juegos los que le pusieron la prueba más difícil.
Después de pasar los primeros nueve años de su carrera con los New York Yankees, Caldwell fue cambiado a los Boston Red Sox, donde compartió habitación con el legendario Ruth. Tanto la propensidad de Ruth como la de Caldwell para las fiestas resultaron ser una mala combinación, y después de un comienzo débil de la temporada, Caldwell fue liberado.
Babe Ruth aparece en un uniforme de los Boston Red Sox en 1919. (Foto de AP)
"Lanzó para los Yankees y tuvo algunas buenas temporadas, pero a menudo era disciplinado por no presentarse, ya sea por problemas relacionados con el alcohol u otros incidentes", dijo Feador. "Terminó yendo a los Red Sox, donde compartió habitación con Babe Ruth, lo que supongo que añadió más leña al fuego, supongo, ya que Babe era conocido por ser un fiestero".
Tras ser liberado por Boston, Caldwell fue contactado por Tris Speaker, un jardinero del Salón de la Fama que en ese momento era jugador y mánager de los entonces-Indians. Fue en Cleveland donde Caldwell tendría algunas de sus mejores actuaciones.
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¿Fue encendido por el impacto del rayo? Algunos piensan que sí. Probablemente también no ayudó que Speaker trabajara para frenar el consumo excesivo de alcohol de Caldwell.
Según Feador, el autor Michael Lewis escribió en un libro de 1949 que Speaker y Caldwell pudieron haber acordado uno de los contratos más singulares en la historia de las Grandes Ligas de Béisbol. Lewis escribió que el contrato incluía el requisito de que Caldwell se embriagara la noche después de lanzar, para luego levantarse a la mañana siguiente para correr carreras, y finalmente no beber el día antes de su siguiente apertura.
Es una historia que Feador mira con ojo suspicaz, pero dijo que el relato ha sido repetido lo suficiente como para que la gente lo considere una verdad histórica.
El mánager de los Cleveland Indians, Tris Speaker, es visto en el campamento de entrenamiento de primavera en Lakeland, Florida, el 11 de marzo del 1926. (Foto de AP)
Pero independientemente del contrato, la estancia de Caldwell con los Indians resultó fructífera, ya que solo un par de semanas después del impacto del rayo lanzaría un juego sin hits antes de ayudar al equipo a ganar su primer título de la Serie Mundial la temporada siguiente.
"También puedes ver cuánto significaba para los fanáticos de Cleveland porque en los años 60 todavía había mucha gente viva que recordaba al equipo de 1920", dijo Feador. "Para un jugador que tuvo una temporada así, que se solidificó… los fanáticos todavía recuerdan que Ray Caldwell fue uno de los que llevó al equipo al éxito".
El legado del rayo, "Créelo o no"
El impactante evento de ese juego de 1919 puede no haber sido considerado notable en ese momento, pero un siglo después la historia ha cobrado nueva vida.
En el Salón de la Fama del Deporte de Chautauqua, Anderson dice que los fanáticos quedan asombrados cuando escuchan la hazaña.
"Literalmente les salen los ojos de las órbitas y están incrédulos", dijo. "Dicen, 'Eso no pudo haber sucedido. No hay forma de que un tipo pueda ser alcanzado por un rayo, quedar inconsciente y luego levantarse y terminar el juego'".
Años después del evento, Caldwell recibió $100 por aparecer en el programa de radio de Robert Ripley, "Ripley's Believe It or Not."
Hoy en día, la historia resurge cada ciertos años en las redes sociales. Feador dijo que en 2020, compartió recortes de noticias de The Plain Dealer sobre el famoso juego y un canal de deportes local destacó el momento histórico durante un segmento de "este día en la historia".
Feador añadió que a pesar de todos los logros de la carrera de Caldwell, "probablemente es más recordado por ser alcanzado por un rayo".
"Ray Caldwell es simplemente un personaje fascinante", dijo Anderson. "Es una historia tan notable que es difícil de creer, considerando lo que sabemos sobre el béisbol en la actualidad. Cuesta creer que algo así haya podido suceder".
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